Este lugar ofrece un delicioso desayuno continental y un personal acogedor y educado, además de estar ubicado a una corta distancia a pie de la Sinagoga del Templo.

La limpieza, que estaba todo nuevo e impecable, la amabilidad de las recepcionistas, todo

Solo habían edredones, pero al final nos dejaron una sábana

Ubicación: el hotel estaba a pocos pasos de los sitios principales y del centro de la ciudad y de una parada de autobús...

Una estancia magnífica, como siempre. Un alojamiento muy limpio y maravilloso con una ubicación excelente y también increíble en las inmediaciones de estupendos bares y restaurantes y de todas las atracciones principales. El desayuno era excelente, el personal muy amistoso. Habitaciones modernas y espaciosas con balcón, unas preciosas toallas mullidas y también una cama doble. Una atención al cliente agradable.

Hotel fantástico en un edificio de estilo histórico es elegante. Una habitación moderna, un baño impecable. Desayuno continental muy bueno con huevos fritos, jugo de frutas y youghurts, personal muy amistoso y agradable. Diría que tiene una ubicación encantadora y también increíble, muy cerca del centro, de restaurantes, de la plaza principal de la ciudad. Cerca del Barrio judío de Kazimierz. Todos los servicios eran agradables. En el hotel hay WiFi gratis. La experiencia ha sido increíble.

El personal muy amable y atento. El restaurante da muy buena comida polaca, y hay wifi. Muy bien localizado, a pie, puedes recorrer el barrio judío, muy animado, y llegar fácilmente al centro. Parada de tranvía a 2 minutos, y conexión con el aeropuerto a través de la estación de trenes. Muy cómodo.

No hay ascensor. En mi habitación número 3, el wifi era reducido, pero abajo en el restaurante perfecto!

La ubicación de este hotel es inmejorable, situado en el antiguo barrio judío con todas las calles llenas de comercios y animación. Además, está a solo cinco minutos del centro histórico. El personal del hotel fue muy amable y atento durante nuestra estancia, siempre dispuesto a ayudar en lo que necesitábamos.Las habitaciones fueron una grata sorpresa, totalmente renovadas y muy confortables, con atención a cada detalle. Además, en los pisos superiores hay habitaciones con balcones muy grandes, lo cual nos permitió disfrutar de las vistas de la ciudad.El desayuno fue muy completo, con una buena variedad de opciones y la posibilidad de pedir algo recién hecho al momento. Definitivamente, esta fue una estancia con una estupenda relación calidad-precio.

Todo estuvo bien.

La ubicación es perfecta, muy cerca de los principales puntos turísticos. Además en la zona hay muy buena oferta de restaurantes y bares. Decorado con muy buen gusto.

Todo nos ha gustado. El dueño y Arthur muy dispuestos a buscar soluciones y simpáticos.Habitaciones amplias y agradables. Excelente relación calidad precio. Recomendamos cenar en el hotel.

Algunos días el desayuno está flojo.

Ubicación excelente en barrio judío. Encanto del antiguo edificio restaurado.- Patio interior para cenar.- Buena atención al cliente.

No había nada que no me gustara.

La habitación confortable. Todo cuidado y decorado con gusto. La ubicación nos gustó, en la zona hay ambiente por la noche, y cerca del castillo y del centro para las visitas.

Nuestra habitación muy pequeña (aunque hay distintos tipos/precios y las hay muy amplias). No hay ascensor. Se puede aparcar en la calle del hotel.

El hotel es muy lindo en cuanto a la estetica, la ubicacion es buena, las habitaciones no son grandes pero son lindas y comodas. Tiene un restaurant adjunto en el cual se come muy bien.El Hotel es recomendable, sobre todo para gente joven.

No tiene asensor con lo cual para ciertas personas puede resultar un problema. El desayuno es demasiado "salado" para nuestro gusto.

Este lugar tiene una ubicación perfecta, a solo un minuto caminando de la Sinagoga del Templo, las habitaciones son elegantes, bien decoradas y cuentan con aire acondicionado.

Me ha gustado mucho de verdad mi estancia, la ubicación era encantadora lo suficientemente cerca del centro de la ciudad y de las principales atracciones. Habitaciones modernas y espaciosas con un balcón, un espacio de almacenamiento y también una fantástica ducha. El personal era muy amistoso. En el hotel se respiraba un ambiente tranquilo. El desayuno era excelente y los otros servicios eran agradables. Las instalaciones de verdad que eran buenísimas.

El hotel estaba muy limpio, la ubicación era encantadora en el barrio judío y las habitaciones únicas. Me ofrecieron un desayuno excelente y genial, con queso y café fresco y jugo de frutas. Hay un personal agradable trabajando aquí. El check-in era rápido, al menos con nosotros. Me ha encantado cada minuto allí, recomiendo este lugar insistentemente.